Milei reforma la ley para que su hermana sea parte de gabinete argentino

A Karina Milei su hermano, el presidente de Argentina, le dice ‘el jefe’. Es que ha sido su mentora, consejera, impulsadora y confidente.

‘El jefe’ tiene 51 años, dos menos que Javier Milei, y fue su acompañante durante la toma de poder el pasado fin de semana en Buenos Aires.

Karina acompañó a Javier al juramento en el Congreso de la República, saludó junto a él a la multitud de simpatizantes y luego estuvo a su lado en la función de gala en el Teatro Colón.

Es tal la influencia que ‘el jefe’ tiene sobre su hermano, que uno de sus primeros actos fue modificar un decreto del expresidente Mauricio Macri, que impedía la contratación de funcionarios directos.

Adiós a la casta, bienvenida la dinastía

Milei cambió la redacción del decreto 93/2018, que había sido aprobado por Macri para limitar las designaciones en el Estado de familiares directos de funcionarios. 

El nuevo texto permitió nombrar a su hermana Karina como secretaria general de la Presidencia. Eso sí, la designación de familiares para ocupar cargos públicos es una cosa que solamente puede hacer el presidente.

En Argentina, como en Ecuador, la persona que ocupa la Secretaría General de la Presidencia debe ser alguien de mucha confianza del mandatario, ya que se encargará de asesorar al mandatario en temas tan diversos como el diseño de políticas públicas, gestión de relaciones con otras fuerzas políticas, coordinar mensajes y aceitar las relaciones con la sociedad civil.

Javier confía ciegamente en Karina, desde niños era su paño de lágrimas y confidente. Ella lo consolaba cuando él era víctima de violencia intrafamiliar en manos de su padre.

Dicen los que conocen a la pareja de hermanos que es tal la influencia que tiene Karina, que un solo gesto o una fuerte mirada hacen cambiar al nuevo mandatario argentino.

El poder detrás del poder

Karina tiene estudios de escenografía y Relaciones Públicas. Ella fue la que diseñó el personaje de ‘loco’ o ‘león’ que asumió Milei durante la campaña y lo guió en el momento de tejer alianzas. 

Javier lloró cuando tomó el juramento a su hermana, en una ceremonia llena de nervios que tuvo a la pareja a cargo de la Argentina como protagonistas.

Karina se encargó de tejer un blindaje sobre su hermano candidato, función que se espera que mantenga ahora que llegó a la presidencia.

Esta protección no es de ahora, ya que en el 2017, cuando murió ‘Conan’, el mastín inglés que Javier adoraba a tal punto de clonarlo, Karina hizo un curso de médium para comunicarse con animales muertos.

Desde entonces, Milei retomó el contacto con Conan y, dicen allegados a los Milei, que no solamente con su mascota.