La UE ha devuelto ya a 5.000 migrantes que fueron atraídos por Bielorrusia

Unos 5.000 migrantes irregulares que habían sido atraídos hasta las fronteras de la Unión Europea (UE) por Bielorrusia han sido devueltos ya a sus países de origen, según la comisaria europea de Migración, Ylva Johansson, que considera que pese a la desescalada en la crisis, no se debe bajar la guardia.

La comisaria participa en una conferencia sobre el control de fronteras exteriores organizada por Austria, Grecia, Lituania y Polonia, que tiene lugar este jueves y viernes en Vilna.

En la reunión, la titular europea tiene previsto explicar que la UE ha logrado controlar la crisis creada por Bielorrusia hace unos meses y que los intentos de cruzar las fronteras y las llegadas irregulares están disminuyendo, indicaron fuentes comunitarias.

Según Bruselas, hasta la fecha 5.000 migrantes han regresado en vuelos desde Minsk a sus países de origen y se está produciendo una importante desescalada.

No obstante, todavía quedan algunas personas en los bosques de la zona en torno a la frontera y hay que mantenerse alerta, porque aunque el presidente de Lituania, Alexander Lukashenko, ha fallado hasta ahora, sigue "desesperado".

Según la Comisión, la lección aprendida de esta crisis es que hay que trabajar juntos, con los países de origen y tránsito, para gestionar la migración, evitando las salidas, combatiendo las rutas de contrabando y aumentando las devoluciones de los migrantes irregulares.

En la conferencia, la comisaria subrayará también la necesidad de avanzar en una gestión de fronteras inteligente y eficiente que permita saber quién entra en el territorio europeo antes de cada llegada y detener a todo el que suponga un riesgo.

La comisaria hará hincapié asimismo en la necesidad de un acuerdo sobre el Pacto migratorio, tras la crisis en la frontera de Bielorrusia y el desafío que supone la situación en Afganistán.

Los participantes en el evento, representantes de los Estados miembros, de la Comisión y de las agencias europeas, debatirán formas de desarrollar el control de las fronteras exteriores de la UE para responder a los desafíos actuales y futuros. EFE